Una puerta más de la Torre Oscura para reiniciar la búsqueda

(A. Yazharit Flores)

Hablar de La torre oscura, el magnum opus de Stephen King, incita a comentar el proceso creativo del mismo para poder, inevitablemente, compararlo con la película.

King tardó treinta años en terminar de escribir la saga de ocho libros. Inspirado por El señor de los anillos de J. R. R. Tolkien, por el poema “Childe Roland a la torre oscura llegó” de Robert Browning, así como, por el motivo de la búsqueda y el Viejo Oeste de Sergio Leone, el autor se atrevió a crear un universo fantástico con detalles futuristas y a inventar un lenguaje propio. El término ka-tet, por ejemplo, relevante para la trama significa ‘grupo de personas unidas por un mismo fin’.

Repasando el argumento de la saga cabe mencionar que el protagonista, Roland Deschain, proviene de un linaje de pistoleros muy respetado. Roland sigue los pasos de Walter Padick, el Hombre de Negro y ayudante del Rey Carmesí, para obtener la ubicación de la torre oscura, guarida del rey. En los libros el verdadero antagonista es el Rey Carmesí quien pretende utilizar la torre como arma para destruir todos los universos paralelos conectados a través de varias puertas. El ka-tet, es decir el equipo del pistolero, proviene de diferentes tiempos y espacios y está compuesto por Eddie Dean, heroinómano rehabilitado; Susannah Dean, mujer que surge de la fusión del desorden de personalidades de una activista social; el padre Callahan, personaje extraído del libro del propio King El misterio de Salem’s slot; y el niño Jake Chambers. Durante la saga cada uno de ellos se irá sacrificando para proteger a la torre oscura de las intenciones tanto del Hombre de Negro como del Rey Carmesí.

Comparando el libro con la película, la cinta suprime a la mayoría de estos personajes, incluido al Rey Carmesí quien sólo tiene unas breves menciones. El largometraje, dirigido por Nicolaj Arcel, se centra en la relación de Jake (Tom Taylor) con el pistolero (Idris Elba) y presenta como único villano al Hombre de Negro (Matthew McConaughey). Es decir, se enfoca solamente en uno de los universos alternos y no explora las dimensiones del resto de los personajes del ka-tet.

Stephen King

Stephen King (Portlan, USA), escritor oriundo de clase media, ha desarrollado el gusto por la escritura desde su infancia, motivo por el cual basa muchos de los argumentos de sus novelas en experiencias personales. En el caso de La torre oscura, son claras la referencias internas de King con el personaje del padre Callahan, muy a la manera de Lovecraf, autor del que se declara seguidor, así como, de Edgar Alan Poe.

Por su vasta obra publicada King se ha convertido en una referencia obligada de la literatura estadounidense y de terror, haciéndolo acreedor a varios reconocimientos y múltiples premios literarios como el Premio Nacional del Libro (categoría Medal for Distinguished Contribution to American Literature, 2003), cinco veces el Premio Locus, seis veces del British Fantasy Award y el Premio a la Trayectoria otorgado por su alma máter (Universidad de Maine, 1980). Con la saga de La torre oscura King obtuvo el Premio August Derleth a la mejor novela (2005), el Premio a Mejor novela internacional (Deutscher Phantastik Preis, 2005), Nominación al Premio Bram Stoker-Novela (1991, 2003 y 2004), por mencionar algunos.

Si bien la película y la saga de La torre oscura no se desarrollan de la misma manera, la búsqueda y la defensa de la torre se mantienen como eje temático en común. Ingeniosamente, Stephen King se las arregla para conectar ambas versiones a partir del final de la saga dando pie a una suerte de rayuela, como si existiera una puerta alternativa que lleva a la historia de la película. Para que sea más entendible el comentario hay que transitar por el universo de los libros para, después, compararlo con la película.

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A. Yazharit Flores estudió letras hispánicas en la UAM Iztapalapa, fue asistente de editor en la editorial Oxford. Actualmente, es mediadora de lectura, cinéfila por convicción y devoradora de literatura.